Maternizate con  Mom&Baby
Contigo en los momentos más felices
  • Inicio
  • ¿Quiénes somos?
  • Nuestra Visión
  • Servicios
    • Primera visita
    • SPA para bebés
    • Susurradora de Sueños
    • Asistencia y cuidados en partos múltiples
    • Asistencia y cuidados a bebés prematuros
  • Nuestras tarifas
  • Mano Mom&Baby
  • Hablan nuestras madres
  • Bono Regalo
  • Blog
  • Contacto

Lactancia Materna en Prematuros.

11/21/2013

0 Comentarios

 
Imagen
Si para un bebé sano la leche materna es un regalo, para un bebé prematuro es pura supervivencia y, además, una manera de mejorar su calidad de vida.

Al principio...
Los bebés que nacen antes de la semana 32 no suelen tener los reflejos de succión y deglución instaurados ni la coordinación de los mismos. Por este motivo, normalmente, pasan un período alimentándose a través de una sonda hasta que van creciendo y madurando.

Más adelante ...
De la misma manera que cada niño aprende a andar a una edad distinta, los bebés prematuros están maduros para mamar cada uno en su momento. Hay que tener paciencia, fomentar la succión no nutritiva (se vacía al máximo el pecho antes de ofrecerlo) y el piel con piel (si puede ser irrestricto), y esperar el día en que puedan empezar a mamar. Son tan pequeños que se suelen fatigar y es necesario controlar que consiguen mamar de manera efectiva.

¿Qué necesitamos?
La leche materna es un alimento único y para los bebés prematuros, un tesoro, un medicamento que se adapta a sus necesidades y que les permite crecer y evitar ciertas enfermedades características de los niños prematuros. Por lo tanto, hay que animar y ayudar a las madres de bebés prematuros a conseguir una buena producción de leche que les permita alimentarlos. Como todo en esta vida, es cuestión de saber qué podemos hacer:

  • A menudo se necesitan pezoneras para facilitar y mejorar la transferencia de leche (hay que buscar el tamaño adecuado para cada madre / pezón)
  • Tener un buen sacaleches doble eléctrico
  • Botes de congelación
  • Bolsa térmica de transporte
  • Placas de frío para transportar la leche



¿Cuándo empezamos a extraer la leche y cómo la manipulamos?
Tan pronto como hayamos superado el shock inicial, las madres pueden comenzar a sacar leche para sus bebés. Es cierto que la situación es extremadamente dura y resulta agotadora, pero hay que empezar a estimular la producción de leche cuanto antes. Así pues, al cabo de dos o tres horas tras el parto, hay que empezar a estimular el pecho para extraer el calostro.

La cantidad de calostro es pequeña, por lo tanto, es más útil sacar la leche a mano y recogerla con una cucharilla. Una vez terminada la extracción, se puede depositar en una jeringa y guardarla en la nevera si antes de 24 horas no lo puedes llevar debes de congelarla para ofrecérsela al bebé cuando esté estable.

Las extracciones deben imitar lo que sería la succión de un bebé, de manera que cada 2 horas de día y cada 3 horas de noche hay que ponerse manos a la obra. En 24 horas, se habrán realizado de 8 a 12 extracciones.

La leche para los niños prematuros hay que almacenarla y congelarla bajo unos parámetros diferentes que la leche de niños nacidos a término. 24 horas en la nevera, y no por nada especial, simplemente para garantizar que la leche será tan fresca como sea posible y que no habrá tiempo ni opción para que se contamine. Las unidades de Cuidados Neonatales tienen muy bien organizado su almacenamiento y administración infórmate de lo que va necesitando tu hijo, ya que se comienza por muy poquito y va aumentando paulatinamente.

Con un bebé prematuro nada es fácil, pero la leche materna es el toque mágico que a menudo marca la diferencia en la recuperación y crecimiento de estos pequeños aventureros.


No podemos acabar sin mencionar la donación de Leche Materna, en muy preciada y cada vez más existen Bancos de Leche Materna sobre todo en los Hospitales públicos, merece la pena informarte y ser donante, así podrás ayudar a más bebés, prematuros o no, necesitan este tesoro. Tu tesoro la Leche Materna.


0 Comentarios

Una mano amiga para mi bebé prematuro.

11/15/2013

0 Comentarios

 
Imagen
En esta semana celebramos el día internacional del prematuro, queremos que  
desde Maternízate ofrecerles una mano amiga a todos los bebes prematuros, para que cuando estén creciendo dentro de esa cajita transparente (la incubadora), puedan sentirse cerca de su padres. Podéis buscarla como mano Mom&Baby.




0 Comentarios

Tengo que dejar llorar a mi Bebé :´-(

11/13/2013

0 Comentarios

 
Imagen
El recién nacido es un ser completamente desvalido, que depende por entero de sus padres. Sin nuestras atenciones y afecto no podría sobrevivir. Para que nuestro hijo crezca seguro y confiado, debemos darle lo que necesita en cada momento.


Responder a las demandas de nuestro bebé alimenta en él un sentimiento de confianza, que se va consolidando a lo largo del primer año y es de vital importancia. Si el niño puede confiar en las personas que lo cuidan, no verá el mundo como un lugar amenazador y aprenderá a confiar también en los demás. Pero… ¿cómo saber qué espera de nosotros

Hay que estar a su lado El bebé necesita a alguien junto a él, que sea sensible a sus demandas y le transmita cariño y seguridad. Y esta persona suele ser la madre.

  • Con la madre existe un fuerte vínculo afectivo, que se establece incluso antes del nacimiento. Si la relación con mamá es estrecha y sólida, el bebé se siente protegido, y se vuelve confiado.
  • La madre puede afianzar ese vínculo de seguridad con su actitud hacia el niño: acariciándole cuando llora o devolviéndole la mirada cuando él la mira. Estas pautas quedan grabadas en la memoria del bebé: "Soy importante para mi mamá".
  • La dedicación de la madre intensifica la relación. Si es quien más tiempo pasa con el niño, no es raro que sea en ella en quien más confíe él. Por eso, si necesita consuelo y ambos padres están disponibles, suele preferir los brazos maternos (y hay que respetarlo). Esto no significa que el bebé no confíe en papá. Si se deja consolar por él cuando mamá no está, es señal de que también existe un fuerte vínculo con el padre.
  • Que el niño necesite a alguien a su lado no implica que la madre deba estar con él las 24 horas del día. Durante años, los psicólogos insistieron en que los niños requerían, especialmente en el primer año, una única persona de confianza. Pero hace tiempo que esta idea ha sido desmentida. Los bebés asumen sin problemas, y hasta con agrado, que varias personas se ocupen de ellos (aunque es preferible que no sean más de tres). Lo que hacen es desarrollar vínculos de distinta calidad, distinguiendo entre figuras muy cercanas (mamá, papá) y otras más lejanas (el abuelo, la tía, la canguro...).
  • Lo que sí perjudica (y confunde) al bebé es cambiar constantemente de cuidadores.
 



  • Las necesidades de un bebé no se pueden aplazar. Si está hambriento, tiene frío o está asustado, hay que poner remedio sin dilación. Es la mejor manera de demostrarle que puede fiarse de sus padres, porque están ahí cuando los necesita. La teoría de que hay que dejar llorar a los niños, porque si no se malcrían, no tiene fundamento. Cuando un recién nacido llora, sea cual sea el motivo, hay que acudir enseguida y ofrecerle el consuelo que precisa.
  • Cuando un niño llora, está diciendo que algo le pasa, el problema es que muchas veces no es fácil adivinar qué. Al principio hay que esforzarse en descifrar el llanto, observando y escuchando lo que pide en cada momento. «¿Tiene hambre, sueño o, tal vez, el pañal mojado?».
  • Con el tiempo, los padres distinguen los tipos de llanto. Y eso es importante. Pero no hay que sentir remordimientos por interpretar mal el llanto alguna vez. No va a trastocar la confianza que el bebé tiene en nosotros.
  • A veces, el niño ha comido bien, ha dormido, está seco... y no deja de llorar. El recién nacido también puede protestar porque se siente solo y reclama a mamá: el contacto corporal es tan importante y vital como el alimento. Las necesidades del bebé no son solo físicas, sino también afectivas. Necesita un ambiente cálido y acogedor con muchas, muchas muestras de ternura.
 

"Guardar la calma para el niño es tranquilizador que sus padres sean capaces de mantenerse serenos en los momentos difíciles".

  • En ocasiones, cuando el bebé se siente mal, lo único que necesita es una persona que esté con él y conserve la calma. Alguien que le tenga en brazos mientras llora o que se siente junto a su cuna y se quede allí, en silencio, acariciándole la cabeza. Eso le tranquiliza mucho.
  • El problema es que cuando un bebé llora desconsoladamente y los padres no saben cómo apaciguarlo, es habitual que se desesperen y acaben perdiendo los nervios. Entonces, en lugar de ternura y afecto, el pequeño recibe una demostración de enfado: por haber interrumpido el sueño de sus padres, por la impotencia que da no saber qué hacer.
  • El bebé percibe el cambio. Aunque no comprenda el significado de las palabras, nota que el tono de voz es distinto, que la actitud no es tan cariñosa como siempre... Pero eso no le hace perder la confianza, pues reconoce la situación como un desliz. De hecho, si en algún momento de la misma noche vuelve a necesitar a sus padres, los reclamará de nuevo y se dejará consolar sin tener en cuenta la reacción anterior.
  • Lo ideal sería que los padres siempre se mostraran comprensivos y pacientes. Pero, si excepcionalmente no lo hacen, no deben culpabilizarse por no comportarse como el bebé espera.
 

Respetar sus deseos Cumplir sus expectativas también implica saber reconocer cuándo desea que le dejen en paz.

  • El exceso de estímulos molesta a los bebés. Los recién nacidos son muy sensibles al exceso de luz, ruidos... y envían señales claras. Por ejemplo, vuelven la cabeza cuando no quieren recibir carantoñas o empiezan a llorar si se les mira con insistencia a los ojos. Ser sensibles a sus necesidades conlleva estar atentos a estas reacciones y actuar en consecuencia.
  • Estar siempre cerca, saber escuchar, tener paciencia, ser afectuosos, derrochar comprensión, transmitir seguridad... a veces requiere un enorme sacrificio. Pero merece la pena. Lo que se consigue en este periodo tiene repercusión en el resto de la vida.
  • Los bebés que crecen sintiéndose seguros y confiados, después son niños independientes.Además, pueden concentrarse mejor, juegan con más fantasía, se relacionan más fácilmente con otros niños y desarrollan un elevado sentimiento de autoestima.

0 Comentarios

    Autor

    Maternízate

    Archivos

    Marzo 2016
    Enero 2016
    Noviembre 2015
    Marzo 2015
    Enero 2015
    Noviembre 2014
    Septiembre 2014
    Agosto 2014
    Mayo 2014
    Marzo 2014
    Enero 2014
    Noviembre 2013
    Octubre 2013
    Septiembre 2013
    Julio 2013
    Mayo 2013
    Abril 2013

    Categorías

    Todos
    Bono Regalo
    Mano Mom&Baby

    Fuente RSS

Con tecnología de Crea tu propio sitio web único con plantillas personalizables.